miércoles, 10 de agosto de 2016

Cuando la poesía se hace canción

¿Acaso no es maravilloso cuando la música y la poesía se juntan? Dos artes magníficas en perfecta armonía. Tal es el caso de hoy.

Pedro Guerra, cantautor español y Ángel González, también español, pero poeta, mano a mano, voz a voz, haciéndonos felices a los ciuadadanos de a pie. No podía ser más perfecto... ¿o sí?

miércoles, 3 de agosto de 2016

Dándose a conocer

Da gusto tener amigos que escriben tan bien. Y es por eso que hoy, una vez más, comparto esas maravillosas letras que son capaces de hacer llorar hasta al más espartano. Tan maravillosas son.

Hoy es el turno de Óscar Laguna, poeta incomprendido y con cuyo permiso cuento para darlo a conocer.

Gracias a él y gracias a vosotros.


El mundo está lleno de ojos
cansados de mirar,
de rodillas tristes
errando por las mismas esquinas,
aguardando una llamada de,
quizá, una chica, para al fin capitular.

Quizá tres minutos,
cinco si el tímpano sigue de bares,
diez, si nunca aprendió a leer,
veinte, si nunca le enseñaron 
a escuchar.

Te abraza la morfina 
para que el serrucho te desgarre,
un metal extraño junto al menisco
que ni cura ni quita el dolor 
y varios meses preguntándote
por qué.

Los niños aún juegan.
Aún, en la más recóndita
esquina de tu advenediza memoria,
la casa donde vive tu hijo
sigue siendo el descampado
que se llevó tantas horas de
jugar con la pelotita.

Los niños aún juegan a la pelotita ahí.
Tú aún juegas a la pelotita ahí.
Ahí, en el descampado al lado del cementerio.